lunes, 11 de octubre de 2010

Dudas existenciales

Vivimos en tiempos turbulentos donde todo es confuso y ya nada es blanco ni negro sino que esta revestido de matices grises. A las preguntas intemporales que han hecho los grandes filósofos a lo largo de los siglos como ¿de dónde venimos? o ¿A dónde vamos? se suman ahora dudas quizá no tan trascendentes sino mucho más cotidianas, pero no por ello carentes de interés.

El ser humano es raro, así que algunas de estas dudas quedarán para siempre sin respuesta pero para otras muchas tenemos ahora la solución. Javier Fernández Panadero acaba de publicar recientemente un divertido libro sobre las paradojas que rodean al ser humano y lo ha titulado “¿Cómo le explico esto a un extraterrestre?



Publicado por la editorial Páginas de espuma, a lo largo de sus 232 páginas, y mediante el dialogo entre un terrícola y un extraterrestre como punto de partida, se abordan 75 preguntas muchas de las cuales probablemente alguna vez nos habremos planteado muchos de nosotros como, por ejemplo:

¿Por qué el numero de teléfono al que hay que llamar si pierdes la Visa está escrito detrás de la tarjeta que se supone que has perdido?

¿Cómo puede ser que compres algo si te lo ofrecen barato pero sospeches si te lo regalan?

¿Por qué el martillo para romper la ventana de la salida de emergencia está protegido tras un cristal?

¿Cómo puede ser que los blancos queramos estar morenos y los negros se blanqueen la piel?

¿Por qué es lógico comer cangrejo pero no tarántula?

y toda una serie de paradojas de la vida real a las que el autor además de dar respuesta, aprovecha para darnos una serie de explicaciones científicas y culturales que nos serán de gran utilidad para poder comprender un poco mas este universo de locos en el que vivimos.

En definitiva, un libro ligero, ameno y muy interesante con el que además de pasar un buen rato aprenderemos algo de ciencia lo que nunca está de más.

Después de leerlo confieso que ahora entiendo, entre otras muchas cosas, la lógica de que el número de teléfono para avisar de la pérdida de la tarjeta de crédito esté escrito en la propia tarjeta de crédito.

Y para terminar, la banda sonora perfecta para acompañar la lectura de este libro:

2 comentarios:

  1. Vamos a ver, yo no he leído ese libro, pero imagino que lo de la targeta de crédito se debe a dos motivos:
    a) Para que llame el que se la ha encontrado -se supone que todo el mundo es bueno y a nadie se le va a ocurrir quedársela, jaja -. Por lo menos pongamosle fácil la tarea de devolverla a su dueño.
    b) Siempre le puedes pedir a un amigo su Visa para mirar el número y poder avisar tu mismo a la central sobre la pérdida o sustracción.

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  2. La respuesta correcta es la b) pero que hayas pensado en la posibilidad de que pudiera ser la a) no solo me parece genial sino que demuestra que todavía queda gente noble y buena en este mundo Magda. ;-)

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